Caballos andaluces

caballo andaluz

Alzada:

La alzada de los caballos andaluces oscila entre los 163 hasta los 168 cm a la cruz.

Capas:

En las capas de los andaluces se admiten casi la totalidad de colores a excepción del pio. En la antigüedad solo se aceptaban las capas negras, castañas y tordas, pero en la actualidad otros colores son permitidos siendo el tordo el más popular.

Los caballos andaluces también son conocidos como los caballos de pura raza española y son originarios de Andalucía. Son un tipo de caballo ibérico, como el lusitano que se ubica entre las razas equinas más antiguas que existen. Conoce un poco más acerca de esta raza tan especial.

Doma de caballo andaluz

Las características los caballos andaluces

Los caballos andaluces son unos caballos de un tamaño medio tirando a grande pues miden hasta la cruz desde los 163 hasta los 168 metros y sobre todo lo que más destaca de ellos es que son caballos realmente fuertes y muy vitales, tanto interior como exteriormente. El cuerpo de los caballos andaluces es robusto y fuerte y cuentan con una larga crin que los hace realmente majestuosos y muy bonitos y llamativos. 

En cuanto a los colores de su pelaje, los caballos andaluces son de casi todos los colores menos del pio. Antiguamente sólo se aceptaban caballos con pelajes castaños, negros y con tonos tordos pero actualmente se permiten más colores. El más popular de todos es sin duda el color tordo. En cuanto a su cabeza, cabría reseñar que su tamaño es mediano, que está proporcionada y cuenta con unas orejas medianas y móviles y que en ella se encuentra dos ojos vivos, triangulares y muy alegres y expresivos.

Además, su tronco está muy proporcionado y es robusto y el pecho de los caballos andaluces es realmente amplio. Su espalda suele ser redondeada, pero como el resto del cuerpo, también es realmente fuerte. Su lomo es también muy ancho, corto y muy musculado. En cuanto a sus piernas, las cuatro son muy largas y muy fuertes, pero cabe reseñar en este punto que a pesar de ser unos caballos realmente robustos son muy elegantes y están muy bien proporcionados.

Caballo andaluz trotando en la playa

El carácter de los caballos andaluces, aunque impetuoso, se puede controlar si se trabaja con ellos de la forma adecuada puesto que realmente son unos animales bastante dóciles. Además se trata de caballos que aprenden con mucha facilidad y por tanto resultan sencillos de montar, utilizándose en muchos casos como caballos de paseo. Son caballos que pueden resistir circunstancias adversas y son además muy equilibrados, siendo así elegidos por un gran número de personas en todo el mundo y una de las razas preferidas por muchísima gente.

También son unos caballos dóciles y nobles, lo que resulta muy interesante para poder trabajar con ellos y normalmente son obedientes si se les trata con respeto, puesto que al ser inteligentes no aguantarán malas actitudes. Además, estos caballos se utilizan también para distintos tipos de disciplinas deportivas como la doma vaquera, la doma clásica e incluso el rejoneo. Los caballos andaluces son por tanto unos ejemplares realmente versátiles compuestos por un conjunto en perfecto equilibrio que aún la belleza y la armonía de sus formas, su vivaz inteligencia y una gran voluntad de trabajo.

Imagen artística de un caballo andaluz

Conoce la historia de la raza andaluza

Los caballos andaluces son conocidos también como los caballos pura raza españoles. Son unos de los caballos más antiguos del mundo y a lo largo de muchos años ha ido contribuyendo de forma activa a la formación de diferentes razas de caballos. Aunque sus orígenes no están realmente claros, sí se sabe que descienden de caballos árabes que pudieron llegar a la península durante la dominación musulmana. Aunque no pueden definirse sus orígenes, sí se han encontrado pruebas de la existencia de razas equinas durante la época prerrománica e incluso algunos autores romanos como Séneca o Plutarco hablan ya del "caballo de Hispania" definiéndolo como un animal muy dócil, valiente y bello, perfecto para hacer la guerra y para participar en los entretenimientos que tenían lugar en aquellas épocas.

Muchos años más tarde fue el Rey Felipe II quién mandó crear la cabaña caballar y asentó lo que serían las bases definitivas para lograr que el caballo Pura Raza Española pudiera alcanzar su apogeo en los años que vendrían después. Para lograrlo creó las Caballerizas Reales de Córdoba y en este lugar ubicó y reunió a los que serían los mejores sementales y las mejores yeguas de todas las provincias que rodean el erío Guadalquivir y en las que en aquel entonces existían un gran número de caballos. Con esto, nació la conocida como Yeguada Real que más tarde sería la Yeguada Nacional. 

Caballos andaluces tirando de un carro

A partir de aquí, un gran número de los caballos que fueron naciendo de esta alternativa fueron enviados a América, convirtiéndose éste en el origen de un gran número de razas equinas que después nacerían y se criarían en América. Además de éstas, existen otras razas de caballos que surgieron a partir del caballo Andaluz, de entre las que pueden destacarse por ejemplo el caballo Lusitano o el caballo Lippizano. 

Actualmente existen más de 180000 ejemplares de caballos Andaluces o de Pura Raza Española registrados en más de cincuenta países diferentes del mundo. Se trata de un caballo muy querido en todo el mundo que se encuentra muy presente en muchos países de Europa y también de América, resultando muy atractivo para los aficionados de los caballos alemanes, los rusos, los mexicanos e incluso los balineses.

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